Château Haut-Bailly

Château Haut-Bailly nació en 1630, fruto de la voluntad de un banquero parisino, Firmin Le Bailly. Pero su historia se vio fuertemente influenciada en el siglo XIX por un personaje fuera de lo común: Alcide Bellot des Minières, quien aportó a su gestión un rigor científico y elevó las cotizaciones al nivel de los «Premiers Crus». Después de él, se sucedieron varios propietarios.

Daniel Sanders adquirió Château Haut-Bailly en 1955 y se dedicó a restaurarlo, devolviendo al viñedo su superficie original y dotándolo del material y las herramientas indispensables para la elaboración de un vino de calidad. Desde 1979, su hijo Jean Sanders ha continuado y completado su obra. La distinción, el bouquet, la untuosidad y el color, su buen desarrollo y su cuerpo hacen de los vinos de Château Haut-Bailly vinos de gran raza, dignos de ocupar el primer lugar entre los grandes vinos de Francia.

Los actuales propietarios, Robert y Élisabeth Wilmers, están decididos a buscar esencialmente la calidad en todas las etapas de la producción y selección de los vinos. El Château Haut-Bailly fue uno de los primeros en producir vinos secundarios, ya que en 1967 las partidas más finas que no tenían la estructura deseada para el vino principal se comercializaron con el nombre de «La Parde de Haut-Bailly».