Domaine de Trévallon Blanc 2008

Bettane & Desseauve

Sobre el bodega :

Eloi y Floriane Dürrbach plantaron el viñedo en 1973, y desde entonces han hecho de Trévallon una de las joyas de la corona de la viticultura francesa. Situadas en la vertiente septentrional de los Alpilles, las 17 hectáreas de viñedos están rodeadas de un paisaje salvaje y virgen y se cultivan de forma ecológica desde el principio. El microclima fresco, la poda suave y el suelo predominantemente calcáreo confieren a los vinos su estilo distintivo. Los Dürrbach no reclaman la denominación de origen Baux-de-Provence, ya que sus variedades de uva están fuera de las especificaciones estándar: cabernet-sauvignon y syrah para los tintos, roussanne y marsanne para los blancos, y un poco de chardonnay. Los tintos, que se han convertido en tan legendarios como los blancos, tienen un verdadero potencial de envejecimiento y el paso del tiempo les ha dado una mayor finura de expresión. Magnífico.

Guide des Vins Gault & Millau

Sobre el bodega :

Eloi Dürrbach, que estudió arquitectura en la Escuela de Bellas Artes de París, plantó sus primeras viñas en los Alpilles en 1973 y elaboró vino a los 23 años. Todo empezó con el mas de Trévallon, comprado por su padre en 1955, con 60 hectáreas de garriga. Aquí, Cabernet Sauvignon y Syrah florecen en los tintos, complementados por Marsanne y Roussanne en los blancos (con un poco de Chardonnay). Todo con una expresión más "septentrional" que "meridional", es decir, en referencia al valle del Ródano: con elegancia y frescura. Sin pesticidas ni insecticidas, sólo estiércol de oveja como abono y suelos arados.

RVF - La Revue du Vin de France / Guide des Meilleurs Vins de France

Sobre el bodega :

Éloi Dürrbach, que construyó el Domaine de Trévallon en Saint-Étienne-du-Grès en 1973, se ha convertido en una figura emblemática de la Provenza. En su terruño arcillo-calcáreo, expuesto en la vertiente norte de los Alpilles, ha apostado por la Cabernet Sauvignon y la Syrah para producir grandes vinos tintos. Sus viñedos se cultivan de forma ecológica. Viticultor atento y meticuloso, produce vinos IGP Alpilles con un terruño bien definido y uvas perfectamente maduras, combinadas con la justa combinación de vinificación de racimos enteros y crianza (hasta dos años en cubas). Estos métodos producen vinos densos, tensos y refinados. La complejidad aromática de los tintos de Trévallon, con sus notas de especias, garriga y trufa negra, expresa un fuerte carácter mediterráneo, al tiempo que conserva la frescura del norte. Las 2 hectáreas de cepas blancas (marsanne, roussanne, chardonnay y garnacha) producen blancos comedidos y vinosos, con finos amargos y suaves aromas florales. Ostiane y Antoine, hijos de Éloi Dürrbach, llevan varios años haciéndose cargo de esta finca ejemplar.