Domaine partagé Gilles Berlioz - La... deuse 2018

Bettane & Desseauve

Sobre el vino :

Un Mondeuse para morirse. Con toda la distinción de un gran vino, aprovecha una añada excepcional para desplegar su hechizante bouquet floral. Límpido, vivo y sedoso, en boca se despliega con finura y notas de rosa marchita. Increíblemente fácil de digerir.

Sobre el bodega :

Instalado en las empinadas laderas de Chignin, entre calizas, limos y arcillas, Gilles Berlioz cambió sus ropas de paisajista por las de viticultor hace casi 30 años, y no sin éxito. Su finca de 4,5 hectáreas es lo suficientemente pequeña como para permitirle cultivar las vides como un jardín, utilizando métodos biodinámicos desde 2007. En los albores del nuevo milenio, fue uno de los primeros en optar por la agricultura ecológica, porque "el vino se hace ante todo para beberlo" y porque, gracias a los bajos rendimientos, puede obtener vinos concentrados, maduros y sin alta graduación. A partir de 2016, la finca se llamará Domaine Partagé y funcionará según un modelo cooperativo y de apoyo mutuo. Los vinos, vinificados según el principio de "un terroir, una cuvée", sin chaptalización y con un enfoque poco intervencionista, son puros, fácilmente digeribles y fáciles de guardar. Las añadas 2016 y 2017 tuvieron mucho éxito en una gama reducida. En 2018, añada de volumen y calidad, los blancos jóvenes pierden en finura lo que la Mondeuse gana en complejidad y jugo.

RVF - La Revue du Vin de France / Guide des Meilleurs Vins de France

Sobre el vino :

La fruta es maravillosamente crujiente, pero hay un toque de fruta confitada de la añada.

Sobre el bodega :

Hijo de un obrero, Gilles Berlioz es un feliz viticultor autodidacta. Formado como paisajista, empezó en 1990 con 0,8 hectáreas en la zona de Chignin, ayudado por su compañera Christine. Ahora tiene 4,5 hectáreas, aradas con la ayuda de un caballo, y se convirtió a la agricultura ecológica en 2005, seguida de la biodinámica (no certificada). Desde el sencillo Chignin hasta el Mondeuse, sin olvidar el excepcional Chignin-Bergon vinificado por selección de parcelas, todos los vinos ofrecen expresiones sanas y serenas de gran profundidad de sabor. Los entendidos se hacen con estos vinos de orfebrería, de volumen muy limitado. La acogida en el domaine es cálida y apasionada. Una dirección imprescindible.